Al más puro estilo Pasapalabra, seguimos completando nuestro rosco particular. Comienza por "i": infectados. Con la "l": lesionados. Con la "s": sancionados. Y, por fin, con la "p": ¡presentados!
Así que después de no poder ni siquiera presentar un quinteto la semana pasada, esta vez podemos plantarnos en la Vermella con un plantel del lujo: Xan, Caki, Marco, JB, Teso y Manu. ¡Incluso tenemos un cambio! Y contamos además con el apoyo incondicional de nuestro público, que doblaba en número al banquillo.
Del otro lado, vemos que Alcabre tampoco va muy sobrado de efectivos, así que se antoja un partido de dosificación por ambas partes. Tenemos más dominio de balón, pero ellos tienen más presencia en la pintura, así que va a tocar bregarse.
Y tal y como parecía, así fue: salimos los dos equipos muy fríos, pero con ganas. Plantamos una 2-3 para intentar contener las posiciones interiores, pero no acaba de cuajar del todo. Por un lado, tenemos diferencias de tamaño que nos dejan en desventajas y tenemos que suplir a base de colocación, y por otro hace cortes continuos para ganarnos la espalda. El resultado es que consiguen tiros cerca del aro y segundas oportunidades en el rebote, y nos caen los puntos,
Para compensar, en ataque conseguimos estar ordenados, circulando el balón por el exterior e intentando buscar a Manu y Testo en la zona. Cuando eso no funciona, el acierto en el tiro a media distancia de Xan y Caki nos mantiene a flote. Intercambio de puntos en Traviesas.
Hacia la mitad de la primera parte, intentamos estar más atentos a los cortes en defensa y parece que empezamos a molestar más porque los tiros ya no son tan fáciles, y aunque siguen con segundas opciones por el rebote, también son menos y los puntos dejan de llegar.
En ataque, conseguimos más penetraciones directas y doblar balones desde el poste alto, lo que nos lleva a canastas y a la línea de tiros libres, donde Caki se muestra inmisericorde. Llegamos al descanso 8 o 9 arriba.
La segunda parte empieza más o menos igual, aunque ellos empiezan a meter desde media distancia y nosotros incluso tuvimos un triple de Xan. El acierto de nuestros pívots en la pintura y de nuevo las penetraciones nos mantienen a flote y hacen que aumentemos un poco más la ventaja.
Ellos cambian la defensa a individual y añaden un punto de velocidad al ataque, con lo que el partido enloquece un poco. Es más una declaración de intenciones que otra cosa, porque el físico no da y los contraataques y carreras acaban en fiasco de uno y otro lado. En medio de la vorágine, nuestras acciones individuales van sumando puntos poco a poco y llegamos al final con la "v" de victoria.
Ahora toca animar a nuestros caídos, ayudar a que se recuperen a base de cerveza e intentar pasar un buen rato
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