Partido jugado
en Bouzas, el domingo a las 11:15
Por nuestra
parte estábamos 9. Rubén, Javi, Óscar, Berto, Camilo, Gonzalo, Jacobo, Xan y yo.
Faltaban
Marco, Kaki, Pabletovic y Coqui.
Alcoba vino
con el equipo completo y con un par de caras nuevas (al menos para mí) entre
las que estaba Kris Piñeiro. Gran refuerzo.
Salimos de
inicio Xan, Camilo, Rubén, Javi y yo.
El partido,
desde el principio, se preveía complicado, tanto por la calidad del rival como
por lo espeso que suele ser jugar siempre contra este equipo.
Se esperaba un
partido difícil para arbitrar para dos árbitros y, mucho más, siendo sólo uno.
Le toco la
faena a Dani. Creo que no estuvo demasiado acertado. A él le tocaba poner el
listón y decidir por qué “derroteros” se iba a mover el partido y, bajo mi
punto de vista, decidió no mojarse demasiado, dejar que el listón lo pusiesen
los equipos y “dejar jugar”. Actitud totalmente respetable, bajo mi punto de
vista. Es lícito decidir no complicarse.
Entonces, con
Dani algo inhibido en determinadas acciones, el partido se convirtió en algo
más que baloncesto. Era también una “batalla” táctica para ver quién manejaba
mejor la situación. Y aquí, Alcoba, creo que se mueven como pez en el agua, fueron
mucho más listos y mejores que nosotros y nos ganaron en todo.
Los ataques
eran espesos, con Alcoba defendiendo con ayudas a Rubén, dos y, a veces, tres contra uno, los tiros no querían entrar, incluso algunos claros que nos podían
haber metido más en la pomada los escupió el aro.
En el minuto
15 de la primera parte sólo llevábamos un tiro de campo convertido (un triple)
y, el resto, de tiros libres.
La primera
parte acabó 15-18 a favor de Alcoba. Sí, parecía balonmano.
En el descanso
los comentarios eran que teníamos que intentar darle la vuelta a esto e
intentar buscar más fluidez, pero no fue
posible.
Todo siguió
igual. Partido muy físico por las dos partes, codos, rodillas, empujones,… creo
que sin maldad por ambos, pero con mucha dureza. En los primeros minutos de la
segunda parte en un balón dividido en el centro del campo le cayó falta a
Rubén, que protestó y le pitaron una
técnica, la cosa continuó y, al final, acabó en patada al balón que fue a la
grada y… descalificante.
El resto del
partido fue un quiero y no puedo, con Alcoba moviéndose en una horquilla que no
subía de los 4-5 puntos de ventaja con tiros nuestros que no entraban, con
penetraciones forzadas tras choques
varios que acababan en malos tiros o pases, y con alguna canasta con más fortuna por parte
de ellos, como un triple frontal a tablero.
Entremedias
nos pitaron otra técnica, creo que a Camilo, el cual, por cierto, se llevó un
buen rodillazo.
Una canasta de
Óscar nos puso a 2-3 puntos faltando 3-4 minutos, pero fue un espejismo.
Así llegamos a
los últimos minutos en los que decidimos hacer faltas para intentar que no
corriese el reloj, pero al final, fue
peor el remedio que la enfermedad ya que, a nuestros fallos en ataque respondía
Alcoba con tiros libres convertidos para acabar en una ventaja final de 11
puntos con un marcador de 40-29. Creo que nunca en nuestra historia, y que
alguien me corrija de no ser así, acabamos un partido con tan pocos puntos.
Alcoba nos
ganó en todo, más puntos convertidos, creo que menos faltas pitadas, menos
técnicas recibidas (0-3) con lo que no hay nada que decir. Hicieron su partido
y justos vencedores.
Partido feo
donde los haya, creo que el marcador lo resume todo. Muy poco baloncesto en un
partido en el que se enfrentaban el actual campeón de Vigoenxogo, entre los
máximos anotadores de la categoría, contra un grupo de gente que, hace nada,
jugaban en una liga federada, y que acabó con un pírrico 40-29.
Al acabar el
partido fui a saludar a Dani y a recoger las fichas y me llevé una sorpresa al
ver que la de Rubén no me la devolvía y me dijo que le iban a caer partidos. En
el acta Dani reflejó que Rubén le había dicho algo que, al parecer, no era ese
algo si no otra cosa distinta, tal y como creo que nos dijo Xan que le estaba recordando Orlando,
un jugador rival, al propio Dani. Pero bueno, es lo que hay.
Se me vienen a
la memoria, de mi experiencia en Vigoenxogo, muchas acciones resueltas sin sanción
bastante más graves. Incluso, en este mismo partido, un rival amenazó a otro
con unas hostias, o con matarlo, delante del árbitro y no pasó absolutamente
nada. Yo, sinceramente, pensaba que, a Rubén, con las dos técnicas y echarlo
del partido había sido suficiente, pero veo que me equivoqué.
Tenemos “mala
suerte” contra Alcoba. En un partido de Liga jugado contra ellos, también pitado
por Dani, una jugada con un balón dividido en el centro del campo acabó con
Kaki expulsado del partido con técnica por decir “Qué”.
Acabamos muy
quemados y con muy mal sabor de boca, es cierto. No recuerdo ver a gente
tranquila como Javi o, sobre todo, Alberto!! tan quemados y enfadados al acabar
un partido.
Bueno… aún queda mucho playoff y hay muchísima
igualdad con lo que puede pasar de todo.
Nuestra
intención, a partir de ahora, seguirá siendo la de siempre. Dos cosas, pasalo ben
e non mancarse. Por ahora, en lo que va de playoff, sólo hemos conseguido una
de las dos cosas en cada uno de los dos partidos… en el primero se lesionó Kaki.
Aúpa Amenaza!